Nilens Jord: El maquillaje danés de farmacia

Después de un par de semanas de vacaciones y de una (casi) total desconexión, vuelvo a la carga con el blog para hablaros de maquillaje. Lo cierto es que después de estar en un lugar en el que la temperatura nunca bajó de 35º, venía dispuesta a hablar de solares, pero a la vuelta me di cuenta de que el verano aquí no está, aunque sí se le espera, así que he decidido dejar la sesión de solares y cuidados de la piel en época de calorcito para un próximo post.

Mientras tanto, voy a hablaros de una marca que, según veo, es relativamente poco conocida en nuestro país, pero creo que tiene productos muy interesantes que merece la pena conocer, os hablo de Nilens Jord.

Nilens Jord es una marca danesa de maquillaje y tratamiento con (según su web) más de 30 años de experiencia en el sector.  En España la podemos encontrar desde hace un par de años en farmacias varias. Vamos a verlos.

Bases de maquillaje Second Skin Serum Foundation y Skin Velour

Cuando conocí, mucho antes de probarla, la base Second Skin Serum Foundation, supe que podíamos llegar a ser buenas amigas, y no me equivoqué. 

Es una base ligera, con cobertura baja-media aunque perfectamente modulable, que deja ver tu propia piel y no se siente en absoluto pesada o 'gruesa' sobre la piel, al contrario, unifica el tono y deja un aspecto de piel bonita sin recargarla. Es perfecta para el efecto 'no makeup makeup', y por eso me gusta tanto.

Su acabado es satinado, lo que para mi es un acierto, porque el resultado que ofrece es el de una piel unificada y luminosa, pero con un efecto siempre muy natural.

En cuanto a su duración, en mi caso (piel seca) aguanta bastante bien la jornada sin dejarme la cara con brillos o a parches. A las muchas horas sí tengo que matizar en la nariz, aunque no he probado base con la que no lo necesite.

Se presenta en formato gotero (de 25ml) de cristal esmerilado, y aunque funciona bastante bien, es quizás lo que menos me gusta de esta base. Yo prefiero el formato pump de toda la vida, que reservan la base del contacto con el aire. En cualquier caso el gotero no se atasca ni sufre o se degrada con los usos, así que bueno, ni tan mal.

Mi tono es el '548 Classic' y aunque en invierno me quedaba un pelín oscuro, esta primavera el tono me ha ido perfecto.

 Sobre la Skin Velour no puedo contaros con mucho detalle, básicamente porque el tono me queda bastante oscuro y la tengo en la reserva para probarla bien en verano.

Esta es una base mate, de textura más densa que la de su hermana de gama, y con una cobertura mucho mayor también. Promete una piel hidratada y sin brillos con una cobertura total.

Como os comento, no la he podido catar más allá de pruebas varias en casa porque el tono me queda oscuro, por lo que no puedo hablaros sobre su duración en condiciones normales. Sí puedo deciros que es una base que hay que trabajar rápido porque se fija a la piel muy rápidamente y que el tono no se oxida. El acabado es totalmente mate y aunque no soy muy amiga de este tipo de acabado ni de texturas densas, seguro que el verano de Córdoba me hace recurrir a ella más de una vez.

Por lo que he podido probar, su cobertura es muy, muy alta, pocas bases tengo que cubran tanto con una sola capa. Se seca muy rápidamente, queda fija en la piel y no transfiere (insisto, pruebas indoor). 

Mi tono es el 454 Walnut, y es un tono medio de subtono neutro/rosado.

Matt Lips Creamy Liquid Lipstick

Es, para mi, el descubrimiento de esta marca. Es un labial líquido, de acabado mate pero que curiosamente, no se seca al instante, sino que lo hace poco a poco hasta fijarse en los labios. Si conocéis los Velvet de Bourjois, sabréis a lo que me refiero. Esto es una ventaja para las torpes como yo, porque deja un margen de maniobra y corrección de errores que agradezco enormemente.

El tono es absolutamente precioso, un vino apagado, con un subtono marrón rojizo que lo hace muy especial. Quizás pueda parecer un tono otoñal, pero qué queréis que os diga, me niego a renunciar a estos tonos en los labios por muy verano que sea.

Su textura es densa y si no quiero pasarme, tengo que escurrir el aplicador, porque con la cantidad que sale podría maquillarme los labios cuatro veces, cunde muchísimo. Una vez seco, es muy cómodo, no noto que reseque los labios ni los noto pesados. 

La duración es excelente. En este sentido me ha sorprendido mucho, no voy a decir que aguanta lo que le echen porque esto todavía está por inventarse, pero casi. Para lo poquísimo que lo noto en los labios mientras lo llevo puesto, la duración es un 10. He comido, bebido y pasado horas con él y apenas ha perdido color y, si lo ha hecho, ha sido de forma bastante homogénea. No pierde color en las mucosas o comisuras, o al menos, no de la forma que todas conocemos con este tipo de labiales. 

Contiene 7,5ml. El tono es el 920 Brave e insisto, si tenéis una farmacia con la marca cerca, ¡Probadlo!

Colorete Guava y Rose Glow Creamy Touch

El colorete en el tono 701 Guava se presenta en una polvera rectangular, con espejo y brochita (aunque la mía está aún por estrenar). 

Es un colorete en un tono rosa clarito con círculos dorados, que al pasar la brocha se mezclan y hacen que el colorete tenga un acabado satinado.

Es un colorete discreto, así que paso la brocha sin miedo, mezclando los dos tonos cada vez. El tono tostado aporta calidez y el rosa da aspecto saludable, así que la mezcla ofrece un tono bonito, aunque más bien discreto en cuanto al colorido. No me resulta un inconveniente porque soy de las que pasa la brocha con ímpetu y el resultado me gusta mucho, pero si lo que buscas es un colorete hiperpigmentado, este quizás no sea el tuyo.

Sí puede serlo en caso de que, como yo, seas de las que te resulta muy difícil modular o difuminar los coloretes con mucha pigmentación.

El acabado es, en mi caso, muy natural, así que creo que es un colorete perfecto para diario.

Por último, os hablo de Rose Glow Creamy Touch, un iluminador en formato crema. 

Su tono en la barra es rosado, aunque una vez en la piel el tono rosa es ligeramente perceptible. Me gusta mucho que la barra es bastante compacta y la noto poco grasa, por lo que es muy fácil de utilizar y modular. 

Lo utilizo como iluminador y para dar puntos de luz al maquillaje y el efecto me gusta mucho. Ilumina, pero de una forma discreta, sin brillos ni partículas de shimmer, más bien es un glow discreto y bien difuminado, la luz parece propia.

Cunde muchísimo. Lo he usado mil veces y la barra está casi como nueva. La duración en la piel, también es muy buena, y lo dice alguien que no quería coloretes ni iluminadores líquidos o en barra y resulta que me estaba perdiendo una gran fiesta sin saberlo. La duración y el resultado del formato crema, por norma general, me ha terminado gustando tanto o más que con los productos en polvo.

El tono del que os enseño es el  720 rose glow. 

Y hasta aquí mis pruebas (hasta ahora) con la marca de maquillaje danesa. En general, me han parecido productos de buena calidad, y con una duración estupenda en la piel.

 ¿Conocíais la marca? ¿Habéis probado algo?