Base de Maquillaje Beauty Me | Alice In Beautyland

Tengo que empezar este post diciendo que, normalmente, no soy -o era- muy amiga de las bases en polvo. Con una piel que tira más bien a seca y que tiende a la deshidratación, maquillarme con bases de este estilo solía suponer piel reseca, acartonada, más deshidratada de lo normal y poros y finas líneas muy marcadas.

Y digo solía porque gracias al cielo (y a los avances cosméticos), esto ha cambiado y mucho, y a día de hoy encontramos en el mercado bases en polvo de excelente calidad que permiten a las pieles secas matificar el maquillaje, o incluso maquillarlas directamente con polvos.

Hoy os cuento qué tal me ha funcionado la base de maquillaje Beauty Me de la firma Alice In Beautyland. Para quienes no conozcáis la marca, os adelanto que es una firma española de cosmética y maquillaje totalmente natural, con una gama de productos reducida pero bien escogida. A día de hoy cuentan con un gel limpiador, una crema facial, coloretes, la base que hoy nos ocupa, y brochas específicas para ambos productos.

Beauty Me 

La firma la define como una 'joya para la piel' por su contenido en minerales naturales. Su composición tiene, entre otros, polvo de diamante, rubí, piedra luna, amatista y perlas.

Viene presentada en una cajita de plástico que contiene 7 gramos de producto que dan para mucho. Una malla en el centro deja salir el producto, y la tapa, que va enroscada, es más baja justo en esa zona para no dejar salir el producto cuando lo movemos.

Lo que promete no es poco. La firma dice que es de larga duración y que su cobertura es de ligera a media, pudiendo adaptarla mediante capas. Además promete protección solar natural (aunque a mi jamás me falta un buen SPF50 debajo del maquillaje), y proteger la piel de las agresiones externas. Su composición es 100% natural y es libre de nanopartículas.

Os dejo el inci al completo:

Mica, Titanium Dioxide, Zinc Oxide, Kaolin, Silica, Magnesium Stearate, Copernica Cerifera wax, Pearl powder, Moonstone powder, Amethyst powder, Ruby powder, Diamond Powder
[+/- may contain CI 77491; CI 77492; CI 77499; CI 77007; CI 77288]

Con respecto a los resultados, promete iluminar la piel, difuminar los poros, mejorar y unificar el tono y no sólo promete no resecar, sino que dice ayudar a mantener la hidratación. Visto lo visto, es normal que una piel seca como la mía quisiera probar el invento. Ver para creer.

Empecé a probar la base a principios de verano, una buena época para probar productos en polvo porque con el calor a veces me apetece maquillarme, pero no me apetece sentir nada sobre la piel. Para elegir el tono, la propia web de la marca tiene un sistema dividido por subtonos, así que si no tienes tienda cerca como es mi caso, toca buscar el que creemos que mejor puede adaptarse a nuestra piel. Hay 15 tonos disponibles.

El mío es el 3 olive o 3 de trébol, y aunque me he ido poniendo morena a lo largo del verano, siempre me ha quedado perfecto y sin cortes raros. Y justo ahora que el moreno me va diciendo adiós, el tono se sigue adaptando perfectamente, así que en este sentido, genial.

Nunca he querido pasarme con la cantidad y aunque es una base modulable, mi experiencia siempre ha sido con una sola capa de producto, unas veces más generosa que otras, pero siempre controlando. No tengo una piel conflictiva o con grandes imperfecciones, aunque sí tengo poros dilatados y finas líneas que lógicamente, no quiero que se marquen, sino todo lo contrario. Con las bases busco iluminar, difuminar líneas y poros a ser posible, y sobre todo, unificar.

Muy poca cantidad es suficiente para todo el rostro y el resultado, me sorprendió. Efectivamente la piel queda muy luminosa, unificada, y las líneas, difuminadas. Con los poros hace magia. Ninguna base que haya probado anteriormente, ya sea en formato líquido o polvo, ha sido capaz de difuminarlos tanto sin una prebase debajo. 

Otra cosa que destaco es la sensación de piel desnuda cuando la llevo. Es ligera, muy ligera, no acartona y en absoluto se siente pesada sobre la piel, que se ve -insisto- muy luminosa y aterciopelada. Por último, comentar que efectivamente, no reseca la piel y no siento cómo a las horas de llevarla puesta me pide a gritos un litro de agua y esto, me ha ganado.

Si lo tuyo es la cobertura, probablemente esta base no sea para ti, porque el efecto con ella es el de un no makeup. No cubrirá grandes imperfecciones ni cubrirá en exceso a menos que pongas unas cuantas capas, y tampoco estoy segura de que aún así, lo consiga. Es más bien de ese tipo de bases que consiguen que parezca que la piel está desnuda, pero mucho más bonita. El efecto es el de 'tu piel, pero mejor'. Para mi, es ideal para el día a día, cuando quiero un efecto buena cara pero sin cubrir en exceso.

Con el paso de las horas el efecto aguanta con mucha dignidad y la piel sigue unificada, luminosa y aterciopelada, los tres puntos que definiría como claves de esta base, además de cómo difumina los poros. No suelo tener muchos brillos, así que no sabría deciros qué tal se comporta en pieles que sí los tengan.

En cualquier caso y sin ninguna duda, es la mejor base de maquillaje natural que he probado hasta hoy, así que me alegra saber que hay marcas españolas que están apostando fuerte por un maquillaje natural, de buena calidad y fácilmente equiparables a grandes marcas convencionales.

Además de la base, también tengo la brocha que en su web venden como compañera, la kabuki Nº 10. 

Es de pelo sintético y la borla, hecha de una sola pieza de aluminio. En su web dicen que tiene el tamaño perfecto para aplicar la base. Y efectivamente así es. Si bien es verdad que cualquier brocha de este tipo nos puede hacer un buen apaño, esta brocha tiene el tamaño justo para entrar en el envase y coger el producto sin doblar los pelos o que la brocha sufra.

Es suave, tupida y robusta. La he lavado unas cuantas veces y no ha perdido ningún pelo en el camino, ni tampoco suavidad, siempre recupera la forma y la 'esponjosidad' una vez seca. 

Yo la utilizo en exclusiva para esta base, si bien es verdad que no es imprescindible usar los dos productos juntos, sí que creo que merece la pena por su calidad.

Y hasta aquí. Alice In Beautyland se estrena con un aprobado más que merecido en mi tocador. Ha sido un descubrimiento, al menos, su base en polvo, que para mi se ha convertido en un básico diario.